Caparrós entrena con todos los jugadores disponibles y continúa con las charlas personalizadas

Al Sevilla Fútbol Club le queda un entrenamiento antes de medirse al Club Deportivo Leganés. En este partido trascendental, con una alineación que genera más dudas que certeza, los muchachos de Joaquín Caparrós saben que deben dar un golpe encima de la mesa si no quieren ampliar la mala racha en el Ramón Sánchez-Pizjuán. Sin ganar en casa desde el pasado mes de diciembre, el conjunto nervionense necesita la victoria para calmar los ánimos de una afición más que crispada y que ha mostrado su descontento con el Consejo de Administración durante estos últimos partidos.

Para evitar que la situación empeore y darle un empujón al equipo, Biris Norte ha preparado un recibimiento "como si fuera una final" para el autobús del combinado hispalense. En el vestuario son conscientes de la importancia de ganar al cuadro pepinero, y Caparrós continúa ejerciendo de psicólogo con una plantilla necesitada de moral tras seis jornadas donde la moneda siempre ha salido cruz. Al igual que hiciera con Gudelj y Lukebakio el pasado jueves, en la sesión de este viernes ha mantenido sendas charlas con Lucien Agoumé, Loïc Badé, Juanlu Sánchez, Isaac Romero y José Ángel Carmona.

Marcao y Sow, más nombres propios

Tal y como se puede ver en el vídeo al inicio de la noticia, Marcao ha sido el último en llegar al entrenamiento. Caparrós, lejos de abroncar a su futbolista, lo ha saludad con normalidad antes de que se incorporase al grupo. El brasileño es uno de jugadores con menos protagonismo de la temporada, condenado al ostracismo con Xavi García Pimienta y la situación no parece haber mejorado con la incorporación del utrerano al banquillo hispalense.

Por su parte, Djibril Sow ha regresado a los entrenamientos junto al resto del equipo. El suizo, después de superar las molestias en el tendón de Aquiles, podría entrar en la convocatoria para medirse al Leganés. Su presencia frente al combinado pepinero es un plus para Caparrós, que cuenta con una pieza más para el centro del campo en un encuentro vital.